VINIERON DE FUERA...

En muchos países, a medida que el turismo cobra importancia, el suelo, el agua, la comida, las viviendas, la tierra... los bienes en general suben de precio y pueden llegar a ser de difícil acceso para los locales. Por ejemplo, en Marruecos y según un estudio hecho en 2006, 600 casas de la medina de Marrakech  y 380 en el caso de Essaouira, fueron compradas por turistas europeos, lo que contribuyó al encarecimiento de la vivienda en muchas ciudades marroquíes (en Casablanca el precio se había duplicado en tres años).1 Se ha calculado que en les Islas Baleares un turista produce un 50% más de residuos sólidos que un local.2
                                   

En las regiones tunecinas de  Hammamet y Nabeul, el agua y la mano de obra locales se han desplazado desde la agricultura de cítricos hacia el turismo, que por ahora ofrece una remuneración mejor. En la región de Djerba ha habido un gran crecimiento del turismo, pero la economía local no ha conseguido desarrollarse porque todos los bienes consumidos por los turistas vienen de fuera. Según un estudio hecho en el área mediterránea, hace ya 20 años, el consumo medio de agua por persona y día entre las personas alojadas en los hoteles era de 400 litros, y entre la población local era de 70 litros.3

Bienes públicos y medios de vida tradicionales pueden ser ofrecidos a los turistas y negados a los habitantes del pueblo. En la comarca catalana del Penedès (España) los campesinos jóvenes tienen problemas para arrendar tierras porque los más mayores, viendo que el suelo se revaloriza por el turismo residencial, no venden ni arriendan, esperando que recalifiquen sus tierras y les puedan sacar mejor partido.4

Los 24 campos de golf que hay en la República Dominicana necesitan el doble de agua que toda la industria nacional. En la isla hondureña de Roatán se han protegido varias zonas naturales restringiendo en ellas la caza y la pesca, para atraer a los turistas. Dejaré de cazar iguanas cuando ellos dejen de dragar para hacer nuevas marinas y hoteles y de pescar [langostinos] hasta su extinción,  dice un pescador local.5




1.  J. D. Fierro: Empresarios españoles al asalto del mercado marroquí: la “deslocalización” de los especuladores inmobiliarios. Diario on line Rebelión, articulo publicado el 1 de Diciembre de 2006.
2.  Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente: A sustainable future for the Mediterranean. (Un futuro sostenible para el Mediterráneo). The Blue Plan's enviroment & development outlook, 2006. (El pronóstico del Plan Azul de medio ambiente y desarrollo, 2006).
3.  H. Hamele: A major impact. (Un impacto mayor) Revista Naturopa n. 59, 1988.
4. Diario El País, 30 de Marzo de 2007.
5.
Susan C. Stonich: Political ecology of tourism. (Ecología política de turismo). Revista Annals of Tourism Research
vol. 25 n. 1, Enero 1998.