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Ecodiseño
Qué es el ecodiseño
Desarrollo del proceso hacia el ecodiseño sostenible
Beneficios que supone el ecodiseño en una empresa
Procedimiento para el ecodiseño
casco de un yate


Procedimiento para el ecodiseño


1. Definir los aspectos e impactos ambientales

Los ejemplos que se exponen a continuación se realizarán con un taller de reparación náutica siempre que sea posible.

Para empezar el proceso de ecodiseño de un producto o de unas instalaciones, debemos conocer cuáles son los aspectos que pueden interactuar con el medio ambiente y los impactos ambientales que suponen un cambio en el estado del entorno.

En nuestro ejemplo, podríamos hablar del consumo de agua para la limpieza de embarcaciones como aspecto ambiental, y de la disminución de los recursos naturales y la contaminación del agua como impactos ambientales relacionados con la actividad de la empresa en su instalación.

2. Análisis de los aspectos ambientales y selección de prioridades

Para conseguir este objetivo, necesitamos algún tipo de metodología que nos ayude a cualificar o cuantificar la calidad medioambiental de un producto o una instalación. Vamos a mencionar tres ejemplos, de menor a mayor complejidad y de cualitativo a cuantitativo.

a. Matriz MET

La matriz MET es un método cualitativo que ofrece una visión global de los aspectos e impactos medioambientales relacionados con el proceso de producción.

Esta matriz se divide en tres columnas:

- La primera, M, es el uso de materiales (entradas) en el ciclo de vida.

- La segunda, E, es el uso de energía (entradas).

- La tercera, T, son las emisiones tóxicas, vertidos... (salidas).

En las filas se encuentran las fases del proceso de un producto:

- Obtención y consumo de recursos.
- Producción.
- Distribución.
- Uso o utilización.
- Mantenimiento.
- Eliminación final.

A continuación, vemos un ejemplo incompleto de uso de una matriz MET para una embarcación:


Uso de materiales M

Uso de energía E

Emisiones tóxicas T

Obtención y consumo de recursos

Fibra de vidrio, maderas, metales, etc.

Consumo de energía para obtener los recursos y para el transporte de los materiales

Emisiones debido al pintado de los materiales

Producción en fábrica

Lubricantes, desengrasantes, etc.

Energía en distintos procesos

Residuos metálicos y plásticos, lubricantes, desengrasantes, etc.

Distribución

Embalajes

Gasóleo para transporte

Emisiones de la combustión del gasóleo

Uso


Gasóleo de combustión del motor

Emisiones de CO2

Mantenimiento

Filtros de aceite, agua, jabón


Filtros usados, aguas residuales

Eliminación final



Material de reciclaje, materiales de desecho

Tabla 6. Ejemplo de uso de una matriz MET para una embarcación.

Con la ayuda de un experto medioambiental, esta tabla (completa) nos aporta información para determinar cuáles son los aspectos ambientales prioritarios.

Se recomienda usar este sistema en los casos siguientes:

- Si la empresa se está iniciando en el ecodiseño.
- Si se cuenta con un experto medioambiental (para la interpretación de la tabla).
- Como paso previo al uso de métodos más complejos.
- Cuando no es necesaria mucha precisión.
- Existe una necesidad de visión global rápida.
- Cuando no existan ecoindicadores.

b. Ecoindicadores

Los ecoindicadores son un sistema más complejo que la matriz MET, añadiendo aspectos cuantitativos, y aporta más precisión para priorizar los principales aspectos medioambientales.

En Europa, se han desarrollado ecoindicadores que permiten relacionar las prioridades de los impactos ambientales con actividades operativas o industriales. Se destacan los siguientes esfuerzos: ecoindicators 95 y 99 desarrollados en Holanda (www.pre.nl). En términos generales, el desarrollo de estos indicadores incluye un proceso de priorizar los impactos ambientales negativos que más afectan al país o a la región donde se desarrollan. Posteriormente se seleccionan los materiales y procesos productivos más comunes y a cada uno se le asigna un valor basado en un análisis que tiene en cuenta el daño a la salud humana, la biodiversidad y el consumo de recursos naturales (ecoindicator 99) que ejerce el producto o proceso a lo largo de todo su ciclo de vida. El ecoindicador es el resultado de sumar los impactos y se expresa como un valor dado por kilogramo de producto.

Para ello, se usan unas tablas con los ecoindicadores según los materiales o residuos, que se multiplican por la cantidad utilizada o emitida. El resultado obtenido nos permite ver qué procesos, qué materiales y qué residuos tienen la mayor carga ambiental.

Normalmente se utilizan tres tablas: producción, uso y desecho.

Ejemplo:

Material o proceso

Cantidad

Indicador

Resultado

Cartón (embalaje)

12 kg

69

828

Bolsa de polietileno (PET)

5 kg

380

1.900

A pesar de utilizar menos cantidad de PET que de cartón, vemos que la carga ambiental del PET es mayor.

c. Herramientas de software para el Análisis del Ciclo de Vida (ACV)

Existen programas informáticos que analizan los ciclos de vida de los productos con mucho más detalle y complejidad que los dos ejemplos anteriores.

3. Ideas de mejora

Anteriormente hemos conocido cuáles son los aspectos medioambientales del producto. Para seguir el proceso, deben idearse las posibles mejoras medioambientales. Para ello, se establecen las mismas estrategias que las anteriores:

- Obtención y consumo de recursos.
- Producción en fábrica.
- Distribución, uso y mantenimiento.
- Eliminación.
- La novedosa optimización de la función del producto.


Estrategias de mejora

Tipos de medidas asociadas

Obtención y transformación de recursos

1. Seleccionar materiales de bajo impacto

Materiales más limpios

Materiales renovables

Materiales de menor contenido de energía

Materiales reciclados

Materiales reciclables


2. Reducir el uso de material

Reducción del peso

Reducción del volumen

Producción en fábrica

3. Seleccionar técnicas de producción ambientalmente eficientes

Técnicas de producción alternativas

Menos etapas de producción

Consumo de energía menor/más limpia

Menor producción de residuos

Consumibles de producción: menos/más limpios

Distribución

4. Seleccionar formas de distribución ambientalmente eficientes

Envases: menos/más limpios/reutilizables

Modo de transporte eficiente en energía.

Uso y mantenimiento

5. Reducir el impacto ambiental en la fase de utilización

Menor consumo de energía

Fuentes de energía más limpias

Menor necesidad de combustible

Consumibles más limpios

Derroche de energía/Minimización del uso de consumibles

Sistema de fin de vida

Eliminación final

6. Optimizar el ciclo de vida

Fiabilidad y durabilidad

Mantenimiento y reparación más fáciles

Estructura modular del producto

Diseño clásico

Fuerte relación producto-usuario


7. Optimizar el sistema de fin de vida

Reutilización del producto

Refabricación/modernización

Reciclado de materiales

Incineración más segura

Nuevas ideas de producto

8. Optimizar la función

Uso compartido del producto

Integración de funciones

Optimización funcional del producto

Sustitución del producto por otro producto

Sustitución del producto por un servicio

Tabla 7. Estrategias y medidas asociadas para la mejora en el diseño del producto.


Para generar ideas según estas estrategias, se puede utilizar la técnica del brainstorming o ‘tormenta de ideas'. Para ello, se reúnen los representantes de cada una de las secciones de la empresa, ya que de otro modo no dispondríamos de todos los puntos de vista necesarios para aplicar o diseñar cualquier sistema. Las normas de este método se exponen a continuación:

- Exponer todas las ideas.
- No admitir críticas.
- Decir la primera idea que viene a la mente.
- Dar importancia a la cantidad, no a la calidad de las ideas (ya se tendrá en cuenta la calidad en la selección).
- Hacer combinaciones con otras ideas (la idea es del grupo, no individual).

Para seleccionar las ideas valiosas y priorizar las mejores, debe analizarse, acto seguido a la tormenta de ideas, la viabilidad técnica y económica, los beneficios para el medio ambiente y la respuesta positiva a los principales factores motivadores.

4. Desarrollo de conceptos

En esta fase, posterior a la selección de las ideas de mejora, debe definirse el concepto del producto (o instalación). Las ideas generadas en la fase anterior son los requisitos que se agrupan en una recopilación de condiciones, a partir de la cual se proporcionan los conceptos del producto, en líneas generales, sin entrar en detalle. En todas las fases anteriores nos centrábamos en el medio ambiente y, en cambio, en esta otra, el medio ambiente es uno más de los requisitos, ya que los otros -económicos, técnicos, de calidad, etc.- pueden tener la misma importancia, y no se pueden obviar.

Existen ciertas diferencias si esta etapa se desarrolla en un proyecto de ecodiseño frente al desarrollo de un producto convencional:

- El punto de partida: requisitos ambientales en el pliego de condiciones.

- Para definir el mejor concepto se tendrán en cuenta criterios ambientales, utilizando herramientas como los ecoindicadores, ACV, etc.

Para definir el concepto, siguiendo la recopilación de condiciones, se diseñan bocetos del mismo, teniendo en cuenta que deben cumplirse los requisitos, para seleccionar cuál es el mejor.

Con el objeto de seleccionar el concepto de producto, se puede valorar cada uno de los factores en base al cumplimiento del producto. Es conveniente que en esta fase también participen representantes del área técnica, de diseño, etc., y un técnico medioambiental experto en ecodiseño.

Finalmente, se escoge el concepto que tiene mejor puntuación y muestra valores proporcionados.

Las ideas seleccionadas en la fase anterior pueden modificarse o eliminarse por otras mejores que hayan podido salir durante el proceso de definición del concepto del producto.

5. Producto al detalle

En esta fase se detalla el producto pieza a pieza, paso a paso, mediante bocetos, selección de materiales, etc. Para ello, se deben tener en cuenta todos los factores, ambientales inclusive, y deben cumplirse los requisitos marcados en la recopilación de condiciones.

A la hora de seleccionar los materiales y los procesos, se pueden utilizar los ecoindicadores que cumplan los mejores requisitos. Por ejemplo, podemos seleccionar aluminio sin reciclar, 0,5 kg, con indicador de 780, que hacen un total de 390; o polipropileno (PP), 0,75 kg, con indicador 330, que hacen un total de 247,5. Por lo tanto, en lo que respecta al plano medioambiental, ya que un y otro material tienen la misma función con la misma efectividad, es preferible escoger el PP.

Antes de valorar los detalles, es útil calcular el precio de coste del producto final, elaborar cuestionarios para los usuarios, para ver si encaja dentro de sus necesidades, utilizar los ecoindicadores y crear prototipos para observar su viabilidad.

A partir de este punto, ya se puede elaborar el plan de acción para desarrollar el producto.

6. Evaluación

Es necesario conocer si hemos cumplido o mejorado los factores motivadores que han llevado a la empresa a hacer ecodiseño para sacar el máximo provecho del esfuerzo realizado.

Para evaluar correctamente un proyecto de ecodiseño hay que:

- Valorar la mejora de los principales aspectos ambientales comparando los principales aspectos ambientales del nuevo producto con los del producto de partida (siempre que sea posible) y chequeando el cumplimiento de los requisitos ambientales establecidos en la recopilación de condiciones.

- Analizar cómo afectan las mejoras ambientales al cumplimiento de los factores motivadores. Una vez visto cuáles son las mejoras de los aspectos ambientales, conviene analizar cómo afectan estas mejoras al cumplimiento de los factores motivadores. Es decir, analizar en qué medida hemos logrado aquellos objetivos por los cuales comenzamos a trabajar en ecodiseño.

- Conjugar mejoras ambientales y cumplimiento de los factores motivadores y expresarlo de la manera más entendible para aquellos agentes a los que se desea informar.




piel de tiburón como sustituto de las pinturas antifouling

 

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