Buenas practicas ambientales
Combustibles
Aceites minerales
Extracción de aguas de sentina y limpieza
Mantenimiento, reparación y limpieza de casco
Limpieza de embarcaciones e instalaciones
Reparación y mantenimiento - hibernación de motores
Ánodos de sacrificio
Baterías
 Ánodo de zinc


Ánodos de sacrificio


1. Descripción

Las partes metálicas de las embarcaciones y que permanecen en contacto con el agua sufren un proceso denominado corrosión galvánica. Estas partes metálicas son casco, apéndices, motores y conducciones metálicas y otras partes del interior de la embarcación.

La corrosión se define como el deterioro químico o electrolítico de un material metálico por la reacción con el medio que lo rodea, debido a la tendencia que tienen los metales para volver a su estado natural, en forma de óxidos, hidróxidos y sales.

La corrosión electroquímica se da entre metales en contacto o mediante un conductor de corriente. En el caso de las embarcaciones náuticas este conductor será el agua de mar, que conduce mejor la electricidad que el agua dulce.

Los metales de la parte de la embarcación que actúan como ánodo, donde los electrones abandonan el metal, padecen los efectos de la corrosión. El metal que tenga un potencial más bajo, será el que funcione como ánodo y el que será corroído.

Para evitar la corrosión de los metales utilizados se usan los ánodos de sacrificio. Son piezas con un potencial bajo, que se destruyen por corrosión evitando que lo hagan otras partes metálicas de la embarcación. Se suelen colocar a la vista en contacto directo con el metal que debe proteger y deben ser fácilmente sustituibles.

Estos ánodos son de zinc (utilizado de forma mayoritaria), aluminio y magnesio, como base, aunque incorporan manganeso, titanio y cromo, para mejorar sus características electroquímicas. Por razones ambientales, el porcentaje de presencia de estos componentes está limitado.

Por su función, los ánodos de sacrificio pueden ser fuente de contaminación por su descomposición en el medio. Como consecuencia de los cambios de los ánodos de sacrificio, se producen residuos: los ánodos desgastados.

2. Resumen de la problemática

- Los ánodos son elementos utilizados para evitar el desgaste por corrosión de los metales de las embarcaciones, siendo estos elementos los que sufren esta corrosión. Por este proceso de corrosión, las sustancias bioacumulables se incorporan al medio marino, aunque de forma poco concentrada y difusa.

- Los ánodos desgastados deben ser eliminados, y en este caso, una mala gestión de los mismos puede generar problemas de contaminación concentrada.

3. Buenas prácticas

- Comprobar el estado de los ánodos de sacrificio, sustituyéndolos si están a menos del 50% de su tamaño original.

- Gestionar correctamente los ánodos desgastados, almacenándolos en su contenedor específico y homologado en el área de recogida de residuos para entregarlos finalmente a un gestor de residuos autorizado.

- Estar pendiente de la aparición de tecnologías más limpias (MTDs, mejores técnicas disponibles). Un ejemplo es la sustitución de los ánodos de sacrificio por un sistema de protección catódica (corrientes impresas).

- Los residuos generados en estas tareas deben gestionarse correctamente y depositarse en los contenedores adecuados:

Residuos no especiales/ no peligrosos

CER 170404 Zinc - Ánodos de zinc